ENVÍO REFRIGERADO GRATUITO PARA PEDIDOS SUPERIORES A 70€

Envío refrigerado gratuito para pedidos superiores a 70€

  • No hay productos en tu carrito.
Casa Orzáez

Conservas

Hay algo del otoño que nos encanta. No son los días haciéndose más cortos –que también tiene su aquel–, ni la decadencia de no sabemos qué. Es, más bien, la idea de pasar de ese carácter festivo del verano, que nos fascina, a una etapa llena de planes diferentes, aunque igual de sugerentes y apetecibles. Más recogidos. Más íntimos. Con el otoño, empezamos a quedarnos en casa sin remordimientos, sacamos los calcetines y volvemos a cocinar sopas y cremas.

Es la estación que nos devuelve la posibilidad de disfrutar de pequeños placeres más reposados, que durante el verano echamos de menos. La época del año que, por definición, parece estar hecha para la pausa, el orden y el sentido común. El otoño está muy bien. También porque podemos disfrutar del sabor del verano gracias a las conservas, mientras incorporamos alimentos más otoñales a nuestras cocinas.

Con el otoño llegan las calabazas, las granadas, los membrillos, las peras… y, por supuesto, nuestras conservas y fermentados que, aunque las elaboramos durante todo el año, es en esta época cuando más las disfrutamos, especialmente las compotas.

Prueba a combinar la de ciruela o la de higo con un queso azul; el contrapunto es delicioso. Las elaboramos con fruta fresca cultivada por pequeños productores locales de forma ecológica, que transformamos de manera manual y natural, extrayendo todo su jugo y azúcares mediante una cocción lenta. Como se ha hecho toda la vida.

Además de las compotas, entre nuestras conservas encontrarás chutneys y chucruts, perfectos para acompañar carnes, aunque –honestamente– a nosotros nos gusta ponérselo a todo: tostadas, sándwiches, ensaladas, un revuelto, un salteado de verduras… Las combinaciones son tantas como alcance la imaginación.

Con nuestros fermentados –como el de cebolla blanca con flores capuchinas que elaboramos en verano o el de puerro con pimentón y harissa, ideal para una sopa miso o como topping en una crema de verduras– aprovechamos los excedentes de la temporada mientras ayudamos a mantener equilibrada nuestra flora intestinal, gracias a sus propiedades probióticas. Siempre los recomendamos para quienes buscan mejorar sus digestiones y reforzar el sistema inmunitario. Mano de santo. ☺️